En la era de la digitalización, puede sonar un tanto extraño eso de promover la movilidad urbana. Pero lo que se busca es justamente eso, que los niños y los jóvenes se separen de las pantallas y realicen todo tipo de actividades en el exterior, para que vuelvan a jugar en las calles como se hacía antes.
Jornadas para apostar por la movilidad urbana
Las ciudades se enfrenta a nuevos retos y su población no para de aumentar. Somos tantos que las ciudades necesitan re-configurarse apostando por la movilidad y pensando en la ciudad de las personas y en el medio ambiente, para que los niños vuelvan a jugar en las calles.
Este es el objetivo de muchas personas, entre ellas Pablo Frías, director del Observatorio Movilidad Eléctrica y Sostenible de la UPM. Afirma además que hay un largo camino por recorrer.
En la actualidad, se busca hacer cambios en lo que a movilidad se refiere, lo que implica tomar decisiones. Y es que, al encontrarnos con distintos dispositivos como pueden ser los coches compartidos, los patinetes o las bicis, está claro que la movilidad está cambiando y la manera en la que nos comportamos en las ciudades también. Por ello, es fundamental configurar mejor las infraestructuras.
Es importante invertir en políticas de movilidad para las distinta ciudades. Y, para conseguirlo, es fundamental llegar a acuerdos.
¿Por dónde empezar para arreglar las cosas?
Movilidad eléctrica
Uno de los principales cambios que se han producido de manera instantánea en las ciudades, es la llegada de los vehículos eléctricos. Hoy en día nos encontramos con coches eléctricos, patinetes y otros dispositivos. Es un tipo de movilidad que está muy bien en el sentido de que contamina menos. Por lo que se debe potenciar y aumentar los puntos de recarga.
Claro que, otro de los inconvenientes pasa por las baterías. Por ahora la duración media es escasa para muchas personas, lo que hacen que no puedan utilizarlas para los desplazamientos largos por ocio o trabajo. En ese punto, solo queda esperar a que mejoren y es cuestión de tiempo, de un paro de años más.
Pero también está el hándicap del precio. Los vehículos eléctricos son más caros y no están al alcance de todos. No tenemos, por ahora, opciones económicas y es cuestión de tiempo que bajen. En un par de años.
Una de las formas de que “el precio no sea un problema”, pasa por dar beneficios fiscales para su compra. Es decir, que se penalice el uso y la compra de los vehículos que contaminan y que se premie la compra de los eléctricos, para que para 2030 o 2035 ya se vendan los últimos de combustión.
Y e sque, si se quiere apostar por una nueva manera de movilidad, hay que dejar atrás cosas. Y los beneficios del vehículo eléctrico son muchos en cuanto a ahorro y cuidado del planeta. Sobre todo bajo la mentalidad del carsharing.
¿Y la movilidad autónoma?
Otra de las grandes incógnitas que veremos en unos cuantos años, pasa por los coches sin conductor. Para ello, se necesita desplegar el 5G. Y eso es solo el principio, porque luego nos enfrentaremos a otros problemas como el precio que tendrán estos coches autónomos, que en un principio, serán para unos pocos.
La digitalización
Las tecnologías loT y el big data tienen mucho que ver a la hora de la digitalización de la movilidad, de su transformación. Se basan en recolectar datos para luego analizarlos y mejorar los procesos actuales.
Estas tecnologías nos ayudarían a conectar las ciudades y tener un sistema integrado con datos públicos y privados para acceder a los puntos de carga que hay en la ciudad, las plazas de aparcamiento libres, los vehículos compartidos disponibles, las incidencias y mucho más. Así lo ha afirmado David Cos Alférez, product Manager de Movilidad de Telefónica.
Si conseguimos apostar por la movilidad en las ciudades, los niños lo tendrán más fácil para salir a jugar a los parques. Es una forma de reducir la contaminación y el número de medios de transporte.
¿Qué te parece este plan para apostar por la movilidad? Esperamos que en unos cuantos años empiece a ser posible, porque el tiempo se acaba.